viernes, 24 de julio de 2009

DOSSIER: Sables de Recompensa ó de Honor.




La manera de agradecer las distinciones en combate, se hacían mediante el ofrecimiento de armas llamadas "de recompensa" ó "de Honor". Este tipo de armas, eran encargadas especialmente e iban de acuerdo con el rango y arma del receptor, por lo que por ejemplo a un granadero, se le regalaba un fusil de reglamento, muy cuidado en sus acabados y con una placa en la culata haciéndo alusión a los meritos alcanzados por su receptor en combate, pero si la distinción era merecedora de más, el arma con la que se distinguía era blanca.
Las armas blancas eran la máxima distinción, por lo que un granadero recibía un briquet de recompensa, un Oficial, un sable de acuerdo a su rango y así hasta alcanzar las cotas más altas, según el grado del receptor.
Cuando el receptor era distinguido con un arma blanca, ésta, iba acompañada por una pensión de por vida, de cuantía según el empleo que éste desempeñaba.
En la forografía, podeis ver dos sables de recompensa, el de la derecha, fué ofrecido por el Directorio, al General Charbonnier y va fechado en Maestrich en 1796.
El sable de la izquierda, no tuvo nunca dueño, resulta, que el General Moreau, receloso del poder adquirido por el Primer Consul, el General Bonaparte, quiso igualarle en el derecho que le asistía como Primer Consul de Francia y por el que podía distinguir a los soldados de la Nación, con armas de recompensa. Moreau, hace confeccionar a los hermanos Colaux de Klingenthal, un cierto numero de sables de recompensa, cuyas hojas, de extremado lujo, van referenciadas "donné par le General Moreau" y "An neuf" para regalar personalmente a sus subordinados y Jefes de su Estado Mayor. Al enterarse Bonaparte de este hecho, hace requisar estas armas, de las que se conocen hoy en día unos pocos ejemplares, de los cuales uno de ellos es el reproducido en la fotografía y que pertenece a una importante colección particular.
Pertenece a la época Consular, concretamente al An-IX (1800) y del que se han confeccionado sendos artículos, uno en el nº 319, página nº 23, de la revista francesa Gazette des Armes y el otro en la célebre revista francesa TRADITION Magazine, en el nº 186, pagina nº 5.
Las armas de recompensa o de honor, son reemplazadas por la instauración de la "Legión de Honor", que se aprueba por ley de 29, Floreal AN-X (19 Mayo de 1802), aunqué las primeras entregas las hace Napoleón ya como Emperador de Francia, por decreto del 22, Messidor AN-XII (11, de Julio de 1804) y son distribuidas con fecha 15, de Julio del mismo año, en la Capilla de Los Invalidos en el transcurso de una fastuosa ceremonia.

DOSSIER: Sables "a la Chasseur"



Año 9, de la Revolución, año 1800 del calendario Gregoriano, comienza una nueva etapa para Francia, el Consulado.
Napoleón Bonaparte después del golpe de Estado del 18 de Brumario, es nombrado Primer Consul de Francia.
En éste año se inicia una gran renovación del material de uniformidad para todos los Regimientos que componen los Ejércitos de Francia, así llegan los sables que nos ocupan la atención de éste artículo, denominados "a la Chasseur" AN-IX/AN-XI (montura "a la cazadora" AÑO-IX/AN-XI).
El denominador común de éste modelo es: Montura compuesta de guarda y dos gabilanes oblicuos, galluelo terminado en botón vuelto hacia la hoja, monterilla corrida y puño en madera forrado de cuero, sin torzal y con sendas olivas en latón una a cada cara del puño, para el sable de tropa y con torzal simple, doble ó triple en latón, para los modelos de Oficial.
Las hojas son confeccionadas en Klingenthal, Solingen o Turín, para los modelos reglamentarios de tropa y son enteramente elaborados en acero pulido, con filo corrido, lomo cuardado con contrafilo hacia la punta y dos consideranles vaceos, uno en cada cara de la hoja. Las hojas para Oficial pueden estar confeccionadas en cualquiera de las fabricas anteriores y llevan grabados en oro, motivos florales, militares u orientales con fondo de cobalto en su tercera parte.
Las vainas, para tropa están confeccionadas en acero, de bajo espesor en el año IX, por lo que se renueva en el año XI, dándole un grosor considerable, logrando así que no se abollen con el traqueteo del caballo y las inclemencias del combate. Las de Oficial, suelen ser en latón o en acero, con acabdos más o menos ricos según el gusto y bolsillo de su propietario.
La primera fotografía, presenta dos sables a la cazadora, para tropa de caballería ligera, el de la izquierda está construido en la Manufactura Imperial de Klingenthal y está fechado en Mayo de 1813. El segundo, está construido en la Manufactura de Solingen por Shnitzcher und Kirshbaüm & C. Ambos sables llevan la vaina sobredimensionada modelo año XI. He de destacar, que no he tenida nunca en mis manos ninguna vaina del modelo año IX, debían de ser muy malas, de todas formas supongo que fijándonos bien, en algún museo debe de haber alguna.
La segunda fotografía, presenta tres sables del modelo "a la Chasseur", para Oficial, el primero corresponde a un Oficial de Cazadores a Caballo, el segundo a un Oficial de una Compañía de élite de Cazadores a Caballo ya que entre sus dos gabilanes oblicuos lleva un Cuerno de Caza, propio del Arma de Cazadores y una Granada inflamada, símbolo de "Élite", en los Regimientos Imperiales. El tercer sable perteneció a un Oficial de Artillería Ligera ya que las abrazaderas de la vaina hacen alusión a esa Arma, así como las dos navetas de sujección, que también hacen alusión a la artillería ligera.

DOSSIER: Los nuevos sables "a la Hussarde"




En mi anterior artículo, hablaba de los sables para Húsares, de aquellos viejos sables, que nunca abandonaron, aunqué con el paso del tiempo, esas viejas formas fueron evolucionándo, según la moda de la época, inducida por fabricantes y comerciantes ante la demanda de los modelos tradicionales.
En éste artículo, querría hacer referencia a la evolución de los sables para Oficial de éste Cuerpo y a las nuevas formas que se ponen de moda durante los últimos años del Consulado y en el recién llegado Imperio.
Estas nuevas formas, evolutivas de los viejos modelos, consisten primordialmente en la esbeltez de sus líneas y la uniformidad de sus materiales de construcción ya que principalmente las vainas dejan de ser de madera forradas de cuero y embutidas en hierro o latón, para pasar a ser confeccionadas enteramente en hierro o latón, dándoles así mucha más consistencia y dureza.
Las armas de las fotografias son evolutivas de las llamadas monturas "a la alemana", todas ellas llevan vainas construidas enteramente en latón y sus hojas enbellecidas, como habitual, con motivos florales, militares y orientales típicos de la época, en oro y con fondo de cobalto en un tercio de su extensión, a excepción de la tercera empezando a contar por la izquierda, que lleva una fina hoja de damasco decorada al ácido con motivos astrales, propios éstos de la Caballería Ligera.
Asimismo querría destacar, que el nombre que se le dá a la montura de "a la alemana", no tiene nada que ver con ese País, simplemente es una denominación que define éste tipo de monturas y que nadie ha sabido aclarar. Los mercenarios venidos del Este de Europa utilizaban tanto ésta montura, como la llamada "a la húngara" o "a la hussarde".